Aquí te comentamos lo pros y contras con los que te puedes encontrar a la hora de realizar una instalación u otra, según tus gustos y tu decisión final:
- Instalación de suelo laminado: de todas las instalaciones esta es sin duda la menos laboriosa porque no requiere obra. Este tipo de suelo se instala sobre tu suelo actual sin necesidad de levantarlo. Es por eso que, aún dependiendo de la superficie en metros cuadrados, en pocos días podrías tener todo instalado y, además, estrenarlo nada más ponerlo sin esperas. Hay algunos detalles que se deben cuidar antes de la instalación: que el suelo esté limpio, seco, nivelado e impermeabilizado. Deberás mover tus muebles para que el área de instalación quede libre. Es importante añadir aquí que armarios y escaleras también pueden ser forradas con suelo laminado debido a que cuenta con distintos materiales como pvc o vinílicos y eso hace que su variedad sea infinita en colores o imitando madera.
- Instalación de Tarima Flotante: esta instalación no se aleja mucho de la instalación de suelos laminados porque es muy parecida. En ambos casos no necesitamos obra, y el suelo previo debe estar en las mismas condiciones: limpio, seco, nivelado e impermeabilizado.. La Tarima puede ser de madera u otro material como pvc. Es por eso que en el caso de que la Tarima sea de madera natural, la capa entre el suelo original y el nuevo debe ser muy reforzada ya que la madera puede sufrir daños irreparables si tiene humedad. Aquí también podemos indicar que es posible forrar escaleras con madera y que se suelen seguir los mismos pasos nombrados anteriormente.
- Instalación de Parquet: esta instalación si dista de las que hemos nombrado antes porque en el caso del Parquet, ya sea flotante o encolado, si se necesita obra: hay que retirar el suelo que hay previamente. Pero por lo que realmente destaca el Parquet es por su resultado final: si se han usado materiales de primera calidad el resultado será maravilloso. Eso sí, hay siempre que recordar que su mantenimiento es laborioso en cuanto a limpieza y lijado.
Es Importante recalcar que en toda instalación hay que tener en cuenta las puertas y los rodapiés. En estos casos los suelos suben unos centímetros su elevación por lo que hay que tener en cuenta las medidas de nuestras puertas para evitar que rocen y hagan ralladuras. También tenemos que fijarnos en nuestros rodapiés. Tendremos que sustituir los antiguos por los nuevos acorde con el suelo nuevo.