El mercado actual alberga una serie de opciones para el suelo de casa con múltiples opciones. Por ello es necesario conocer sus ventajas y diferencias para asegurarnos de elegir el tipo de suelo que mejor se adapta a nuestras circunstancias.
Entre los parquets encontramos suelo de parquet multicapa y parquet de suelo de madera. Desde el punto de vista económico el multicapa es la mejor opción, sin embargo también hay que tener en cuenta que el suelo de madera maciza será más duradero, ya que se puede acuchillar y lijar más veces. Podemos encontrar otras clasificaciones, relativas a la instalación del propio parquet en función de si hablamos de tarima flotante o parquet encolado. La tarima flotante se coloca sobre el suelo base sin pegarlo a él mientras que en el parquet encolado, se pegan todas las tablas al suelo, siendo una instalación un poco más compleja.
El suelo laminado por su parte, no admite el lijado ni el barnizado de la misma manera que el parquet, por lo que si se deteriora demasiado hay que sustituirlo. Se trata de un suelo más duro que la madera, hasta el punto de resistir mucho mejor las humedades, los arañazos y las manchas resultando por ello una opción más económica que el parquet. Los consumidores tienden a confundirlo con el parquet y en realidad, el suelo laminado no utiliza madera, sino que se trata de un revestimiento compuesto por varias capas. Lo que ocurre es que la capa decorativa suele imitar la apariencia de la madera (roble, pino, haya etc.), pero no lo es.
Además de ser económicos, podemos encontrar gran variedad de acabados, modelos, grosores, estilos, colores…incluso existen suelos antibacterianos que evitan la proliferación de bacterias, ideal en casas con niños pequeños, o antiestáticos, que no acumulan electricidad estática evitando así la aparición de polvo. Todos ellos son de fácil colocación puesto que las lamas van encajando entre ellas.
En realidad no podemos decir que uno sea mejor que otro, todo depende del uso que se le vaya a dar, la zona climática, la instalación, el presupuesto etc. Es necesario valorar todos estos factores para poder tomar la decisión más acertada.